Llegan las vacaciones de verano, uno de los momentos más esperados para viajar y descansar. Chequear el estado del vehículo se vuelve una tarea impostergable, por eso Nissan presenta unas recomendaciones para tener en cuenta.
“Además de seguir las recomendaciones habituales, NISSAN aconseja a sus clientes que se acerquen a los concesionarios Nissan antes de emprender cualquier viaje; allí recibirán la mejor atención personalizada para la revisión de su vehículo, evitando contratiempos y preocupaciones”, afirmó Gerónimo Bollaert, subdirector de posventa de Nissan Argentina.
Temas a tener en cuenta
¿Cómo afecta el calor?
Las altas temperaturas en el habitáculo disminuyen la atención, la asimilación de información y agudeza visual. Por eso, antes de planificar cualquier viaje durante el verano, es importante pensar en la hidratación constante y la ventilación.
Verificar el líquido refrigerante es fundamental para evitar el sobrecalentamiento del motor y asegurarse que trabaje con la temperatura correcta.
Antes de salir, hay que comprobar si el nivel del refrigerante coincide entre las marcas de máximo y mínimo; el vehículo debe estar en posición horizontal (no inclinado) y, en el caso de que se haga durante el viaje, hay que esperar a que el motor se enfríe.
Revisar el nivel de aceite es un proceso sencillo y debe hacerse con el motor frio. Debe retirarse la varilla de medición (que generalmente tiene una forma de anillo o “T” de color amarillo en el extremo visible), limpiarla, volver a introducirla y sacarla para chequear que esté entre las dos marcas. En el caso de que esto último no sea así, se debe añadir o cambiar el aceite.
Los neumáticos, puede verse afectados con un mayor desgaste y una baja en la presión de aire, generando posibles inconvenientes en las maniobras. Con relación al primer punto, esto se puede revisar fácilmente verificando que el testigo de seguridad, ubicado en la banda de rodamiento (que indica el desgaste del neumático), no coincida con el nivel de desgaste.
Nissan entiende la experiencia y la confianza como dos de los principales indicadores a la hora de tomar una decisión de compra o de recomendar un producto o servicio. Por eso, considera esencial la calidad del servicio que se brinda, el nivel de satisfacción de cada uno de los clientes y cómo la compañía se adapta a sus necesidades para la construcción de estos puntos clave.
